El estudio se realiza a una muestra representativa española de menores de 0 a 15 años. En este estudio se han analizado 6.143 menores de 5 a 15 años.
Mediciones principales Se ha estimado la prevalencia de omisión de desayuno, la prevalencia de bajo consumo de fruta y verdura y la prevalencia de alto consumo de comida rápida, snacks y bebidas azucaradas.
Los indicadores de posición socioeconómica han sido el nivel de estudios y la clase social de la persona que aportaba más ingresos económicos al hogar.
La conclusión del estudio es: En la población infantil y adolescente española la alimentación no saludable relacionada con la obesidad muestra un patrón socioeconómico claro.
Principales hallazgos
En el estudio se ha encontrado asociación entre la posición socioeconómica del hogar y el consumo de alimentos no saludables en la población infantil y adolescente española. Concretamente se ha observado un gradiente inverso: los niños y adolescentes pertenecientes a hogares de posición socioeconómica alta y baja muestran, respectivamente, el menor y mayor porcentaje de un consumo no saludable.
Es una buena noticia si pensamos que SE PUEDE CAMBIAR.
Aquellas personas interesadas en conocer el estudio con más detalle, puede hacerlo a través de: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0212656714000304